tag:blogger.com,1999:blog-1650585864439517750.post6036991785280171786..comments2020-05-13T14:42:42.680-07:00Comments on El Blog de JotaA Morales Gago : Unknownnoreply@blogger.comBlogger2125tag:blogger.com,1999:blog-1650585864439517750.post-52226129976215305812012-11-29T10:19:33.695-08:002012-11-29T10:19:33.695-08:00Querido Anonimo/a, -no me has dejado tu "perf...Querido Anonimo/a, -no me has dejado tu "perfil", aunque no me importa nada-, me ha llegado tu "empujoncito". La vida es tan corta que no se puede esperar a "ver cuando empiezo" ¿verdad?. Pero ya estoy sacandole melodias, claramente inarmonicas, sin contenido escrito; son caricias de teclas esperando me ayuden a encontrar algun dia mi melodia.Juan Adolfonoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1650585864439517750.post-27465804739166239282012-10-26T05:18:46.590-07:002012-10-26T05:18:46.590-07:00Lamento de puentes rotos.-
Mi hora bruja, chelo aj...Lamento de puentes rotos.-<br />Mi hora bruja, chelo ajado, viejo, con solera, pies de bailarina clásica… de ballet, cuco heredado y recuperado que no canta, viejo acordeón, que no se tocar para poderle sacar sus bellas notas. Dices,…”Lo cojo, lo acomodo, muevo su fuelle y pulso sus teclas y suena; voy haciéndome a él y, quisiera, que el a mi. Sueño, -¿un nuevo sueño?- con el día que consiga sacar melodías... de arrabal, que me apasionan”. <br />Precioso articulo que en eterno circunloquio vuelve y retorna al mismo punto de origen, eterno “ritornello” que incansable te persigue, hacer sonar tu viejo acordeón. ¿Para cuando Juan Adolfo? Si no lo sabes tocar, si esta en proceso amplio de limpieza, de eliminación de restos de humedad, de abandono, y cuando lo muevo pulsando su teclado los sonidos salen como si hubiera sonado siempre, permanentemente, con fuerza, limpios, como con deseos de ser escuchados. ¡Tienes posibilidades! Suena bien mi pequeño acordeón. Pero hay un gran problema: no se tocar el acordeón y quizás por ello quiero dibujarlo, y llegar a todos sus rincones con el dibujo. Y quiero hacerlo, no el dibujo, sino tocarlo. Creo que mas claro no lo puedes decir, aunque si, con menos palabras, que sin duda le restarían hermosura.<br />Y vuelve tu eterno “ritornello”. Mis hijos se hicieron mayores, casi todo se convirtió en prisas y obligaciones, el tiempo se convirtió en un bien escaso y un día dejamos de subirle las pesas y se paro y no se volvió a oír su simpático canto: teníamos otras prioridades. El tiempo pasó, mis hijos crearon su propia familia y de pronto, un día descubrí a "mi Cuco". Y sentí el deseo y la ilusión de verlo andar y cantar asomado a su ventanilla de nuevo. Subí suavemente las pesas, moví con delicadeza el pendulillo y espere. Poco duro el movimiento del pendulillo. Lo desplace de nuevo y nada. Bueno, ahora si estará estropeado, pensé, y lo deje. Con los días y mientras lo miraba una y otra vez recordé de su caprichosa sensibilidad: estaba desnivelado. Me costó conseguirlo y una vez que conseguí echarlo a andar me senté a oírlo cantar las horas como cuando mis hijos, pero... se había quedado sin voz: estaba ronco. Lamento de puentes rotos. Lo tienes todo, tu viejo cuco, tu viejo acordeón en proceso de recuperación, “Lo cojo, lo acomodo, muevo su fuelle y pulso sus teclas y suena” ¿A que esperas? ¡Tócalo! Quizás salga otra melodía, distinta tal vez, pero de hermoso canto.Anonymousnoreply@blogger.com