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miércoles, 24 de diciembre de 2008

AL NIÑO "DESCARAO" HACE AL VIEJO "DESVERGONZAO".


"Al niño "descarao" hace al viejo "desvergonzao"". Este dicho, que supongo debe continuar "sonando" por aqui, me lo dijo una de esas "sombras-recuerdos" que tanto, al parecer, debieron influir en mi. Este, el recuerdo, se trataba de un "bailaor", de un bailaor de flamenco, de tablao, que no vivía de ello, ya que tenía su "oficio" y que de él si que no tengo recuerdo; seguramente porque no me interesó. Se acompañaba de una "señales" que le identificaban claramente su segunda ocupación, su ocupación nocturna: una larga melena, unos pantalones ajustados y unos botines con un exagerado tacón que al andar sonaban por toda la calle. Despues de tantos años, y de no haberlo vuelto a ver, y ni siquiera recordar de dónde y porque la amistad, lo que es la memoria selectiva, si recuerdo claramente su figura, sus identidades: su voz, sus gestos aflamencados, su ropa entallada y... la frase que me dijo, y hasta el lugar exacto en donde me lo dijo y de lo que solíamos hablar o quizas de lo que la curiosidad mia haciamos que hablasemos o mejor me contase. Hablábamos de flamenco o mejor me hablaba de flamenco, del enorme trabajo y dedicación que requiere y de las secuelas que dejaban esos esfuerzos a pesar de los zapatos especiales, perfectamente ajustados al pie del "bailaor". Pero lo que no recuerdo es que fue lo que originó la frase que se me quedo como tatuaje en mi memoria: "al niño descarao hace al viejo desvergonzao", porqué me dijo, lo que me dijo.

Hace años, probablemente muchos mas de los que puedo recordar,-el tiempo corre mas deprisa que nosotros-, me decia que si yo "llegaba a los cincuenta años y no habia cambiado me sentiría un fracasado". Supongo que era derivado de la edad y de lo que ella lleva aparejado. De este tema, sobre esta idea, hablamos en la tertulia, que derivó hacia otros temas "colaterales", como se dice ahora, como la "adaptación necesaria al tiempo en que se vive", a "nuestro tiempo", que no me dió respuesta a lo que yo pretendía. Supongo que cuando hice aquella afirmacion era porque pensaba que el hombre no puede creer, pensar, sentir, actuar, amar... como a los veinte años y me lo decia ante la radicalidad en las ideas que "veía" en los mayores de entonces. Hoy, sobrepasando con creces el tope de edad que me puse, me acuerdo de la frase que me dijo mi amigo el "bailaor" y no es que me haya convertido en un "desvergonzao" ante algunos dichos de la juventud de hoy, pero si en un sentimiento de libertad de accion, de pensamiento, de ideas, de entendimiento,... que te facilita decir sin pudor aquello que sientes, que amas, que desprecias incluso.

De todas formas me gusta mas "ser descarao" que ser "desvergonzao". Uno tiene sus gustos y la libertad de decirlo.