Páginas

jueves, 28 de agosto de 2014

Las cuerdas vocales de mi Cuco.












No se como decírselo. Con la ilusión que le había hecho, bueno y a mi. Ya se que me lo comunicaron unos días antes del verano, bueno que decimos verano al hecho de cambiar de sitio, de trasladarte a una zona mas fresquita, aunque este año el fresquito se ha transformado, ha mutado, a frío. ¡Es que ha hecho un frío!  Y claro como estamos en verano pues no es cuestión de abrigarse como si estuvieras en un mal otoño, y hala a salir con camisas de mangas cortas, sin una chalequillo, incluso con pantalones cortos y... ¡He pasado un frío!

.- Mire usted. Tengo mas de 80 años y nunca había visto una cosa así.

Me lo decía una vecina cuando íbamos a tomar el ascensor. Una vecina a la que no recordaba que viviese en mi misma casa; luego pensé que a lo mejor seria un familiar de alguno de los vecinos.

.- ¿Viene usted?. Me dijo sujetando la puerta.

.- Si, si, claro. Le dije

.- No, es que muchos vecinos prefieren la escalera y no me lo dicen hasta que están subiéndola.

.- No es mi caso.

.- Frío en el mes de Julio. ¿Cuando se ha visto esto?. Yo voy al cuarto.

.- Yo me quedo en el tercero.

Le iba a contestar cuando llegamos a mi planta, pero solo me dio tiempo para decirle que seria cosas del cambio climático.

.- ¿Como dice? ¿Cambio que...?

Aproveche que llegaba a mi planta y me despedí. Supongo que lo de la edad seria verdad. Lo que pasa que hoy día no hay una abuela que no vista con ropas alegres y que en otro momento se hubiera dicho que no le pegaba. Y también muy arreglada; igual venia de la peluquería, porque en peluquería hay que ver lo que se gastan las abuelas, bueno y en ropitas... una pasta gansa. ¿Y en viajes? Yo no he visto a nadie que viajen mas que las abuelas; se suben a cualquier cosa que les lleve adonde sea.

¿Que iba diciendo? Ah, que no sabia como decírselo. Si. A mi Cuco, a mi reloj Cuco. Tenía que habérselo dicho antes de venirme, pero es que... ¿Como se lo decía con la ilusión que tenía?. ¿Como decirle ahora que su mal no tiene cura?. Es que es muy fuerte. Bueno y para mi, que ya me lo había figurado saliendo de su casa cantando con la alegría que siempre lo ha hecho; con la alegría y con el tono, porque tenía un tono de canto de cuco que ya quisieran muchos. Como que era raro que no hubiera siempre alguien que no estuviese pendiente de su salida a cantar las horas, o las medias o los cuartos que también los daba. ¿Los niños? bueno... para ellos era un espectáculo que esperaban sentados mirando impacientes cuando se acercaba el momento. Es que mi Cuco... era mucho Cuco, bueno lo es, lo que pasa que al pobre se le han ido las cuerdas vocales, ya os lo conté. Por eso principalmente me he venido y no le he dicho nada. Anda, me dije, ya se lo diré cuando vuelva y claro ahora que ya esta esto dando los últimos toques... casi con colores nostálgicos, con el éxodo de la gente pensando en volver a sus casas... es que es verdad, por aquí, por esta zona de veraneo, entrando en la segunda quincena de agosto... se acabo. Ya lo dicen todos, cuando nos quejamos de los precios abusivos

.-Es que son dos meses, mas o menos!

Ya, ya, pero pretenden vivir con ello todo el año a costa de los veraneantes, que tiene guasa la cosa. Y yo lo noto mas, porque suelo venir durante todo el año, por lo menos una vez al mes. Y es verdad. La zona que en esta época del año es todo bullicio, jaleo, que no se puede ni  pasar, con todos los bares y restaurantes llenos... fuera de este tiempo es una zona sin vida, con mas de la mitad de los establecimientos cerrados... Y es que no tiene turismo de invierno, es un turismo de vacaciones, familiares, de los meses de julio y agosto y para de contar. Juan, otro vecino, patrón jubilado, la otra tarde me lo decía con ese dejillo al hablar característico de por aquí.

.- Es que, mire usteee. Si ahora no se puede ni andaaa. Yo en to el verano he ido una vez a la playa. Es que vienen tos de gorpe, con lo bonita que esta la playa fuera deste tiempo, que da gusto pasearla... Si es verdaaa.

.- Llevas razón Juan. A mi me gusta también cuando esta esto al natural.

.- Po naturaaa.

Y ya que estaba aproveche para hablar de lo del tiempo, lo del frio en el mes de julio.

.- Mire uste los vientos dominantes en Punta son los de Levante… y este año se han metido en Poniente que no hay quien los haga rota.

Y es que pa los naturales, los naturales del pueblo, es como si no fuera veraneo. El pueblo se llena de gente, pero de gente con prisa, bueno es la impresión que me da a mi, y también como si no hubieran comido en mucho tiempo. Es verdad, siempre que salgo un ratito ya anochecido, los veo comiendo, pero con unos platos... y todos de pescaito frito y marisco, bueno y cervezas, que no falte. Y es que aun cuando vivan de ellos, de los turistas, prefieren la tranquilidad, su espacio... y yo estoy de acuerdo. Pero tampoco se porque estoy contando esto, que debe ser porque estoy todavía por aquí, porque de lo que estaba hablando era de como le digo yo a mi Cuco que no tiene cura. Bueno y a mi, porque el tener que hacerme a la idea de no volver a escuchar su parloteo... ahora canta, si, pero es un canto sordo, basto... extraño diría yo y... que no, que no se acostumbra uno. Pero lo acepto, claro, porque el cariño a mi Cuco esta por encima de eso y mas. Hay que tener en cuenta que son muchos años juntos, que han sido muchas horas, que han sido muchos días verlo pendulear con el salero que el solo sabe hacerlo... Y es que mi Cuco es muy suyo. Es originario de Centroeuropa, de alguna zona de Austria o incluso Alemania, no recuerdo bien, los preparan para que a temprana edad se dispongan a comunicarnos que el tiempo pasa inexorablemente, pero haciéndonoslo saber muy agradablemente, con su aleteo y sobretodo con su canto tan característico. Es artesanal y todo de madera, nacido de artesanos relojeros. De allí vino mi cuco hace años, muchos, muchos años. Y, claro, cuando la solución a su problema de cuerdas vocales pasa por un trasplante... pues  no hay manera, las que se encuentran las rechaza. Ya digo, es que es muy suyo mi Cuco. Y eso es lo que le tengo que decir; que tendrá que vivir con sus cuerdas vocales desgastadas el resto de su vida... y de la mía, claro, porque pienso vivir con el hasta que la muerte nos separe.

Y aquí estoy en mi querida terraza dando a una ría preciosa, donde reposan numerosos barcos de pesca a la espera de que les den la orden de salir a pescar, con una temperatura magnifica y con las luces que aportan tanto las instalaciones del puerto de Huelva, como La Rábida y todo el Polo Químico. Incluso las de Mazagon, que se ven ya en la lejanía, reflejadas en la superficie del agua de la ría.

 Es de noche y la calma me incita a meditar sobre como le planteo a mi Cuco la noticia.