En una de tantas estadisticas como nos ofrecen a diario o, como en el caso que me ha llegado, estudios sociales, que llamaria yo, se ha querido profundizar en que grado de congratulacion con su ciudad tienen sus habitantes; los que la viven, los que la disfrutan o, también, los que la padecen. El ultimo puesto lo ocupa Sevilla, que en este caso quiere decir, la ciudad en la que menos se encuentran a gusto sus habitantes. Bien es cierto que la ciudad, Sevilla, ha estado y sigue estando toda "levantada", que sus calles se han visto cortadas, que los vehiculos se han viso obligados a tomar direcciones extrañas, generando atascos e incomodidades a los peaones, pero no creo que sea esa la unica razon por la que los sevillanos han votado tan negtivamente: hay muchas mas razones, algunas derivadas de las molestias de las obras, otras con los efectos resultantes de las obras y otras por razones ya cronicas de esta ciudad encantadora, luminosa y cómoda de pasearla. Si empezamos por las obras, por los efectos de las obras, yo diria que mas que de obras habria que hablar del destrozo de la ciudad. Mientras otras ciudades cuidan con mimo su idiosincrasia, lo que las ha hecho distintas, conocidas, admiradas, queridas, deseadas, en Sevilla las estan haciendo desaparecer, o tapar, o cambiar; se estan cambiando, se ha cambiado ya en algunos casos su fisonomia, por lo que se la conoce en todo el mundo: la perspectiva desde la Puerta Jerez, tanto de la Avenida como de la calle San Fernando, es una aberración. El tren, tranvia, o lo que sea, de un recorrido que segun dicen no llega a los 1.400 metros, y que con la obra de peatonalizacion nos ha salido, dicen, por mas de 6.000 euros por metro, es ademas de un despilfarro, de un trasto y lo mas antisocial que he conocido;solo se beneficiaran una pequeñisima zona de la ciudad. ¿Y Triana? ¿y Macarena? y Nervión? ¿no tenemos derecho?. Podemos seguir por la ejecucion del pavimento, por el diseño de farolas, porque casi ha desaparecido el edificio del Ayuntamiento, entre las catenarias y los postes y continuar por la limpieza: solo he visto a personal de mantenimiento "casi permanente" en las proximidades del Ayuntamiento, situacion que tarda meses en producirse en otros lugares de la ciudad, ¿y los contenedores de basura? pero ¿quien cuida del mobiliario urbano de Sevilla, en el que indudablemente deben incluirse estos contenedores? Si, creo que los sevillanos han manifestado lo que sus dirigentes ni se enteran. ¿Y la setas? Me resisto a hablar de ellas.
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